Rentabilidad de las máquinas virtuales de Windows Server

En mis 15 años de venta de licencias Microsoft, he sido testigo de una importante evolución de la virtualización.
A medida que los servidores se hacían más potentes, las organizaciones han aprovechado esta potencia de procesamiento adicional creando máquinas virtuales en lugar de adquirir más servidores físicos.
En respuesta a las capacidades de los servidores más nuevos y al deseo de maximizar las oportunidades de ingresos, Microsoft hizo la transición de sus licencias del sistema operativo Windows Server de un modelo basado en el servidor a un modelo basado en el procesador, y finalmente al modelo actual basado en el núcleo.
Al conceder licencias con Microsoft Windows Server, el número de licencias de núcleo necesarias es equivalente al número de núcleos físicos del servidor, con un mínimo de 8 licencias de núcleo por procesador físico y 16 licencias de núcleo por servidor físico.
Para entornos altamente virtualizados, Windows Server Datacenter ha sido siempre la opción más rentable.
Desde la retirada de Windows Server Enterprise, Windows Server Standard se ha convertido en la principal opción de licencia para la mayoría de las organizaciones.
Si una organización desea ejecutar más de los dos Entornos del Sistema Operativo (OSE) permitidos en un host con licencia Windows Server Standard, debe volver a obtener licencia para todos los núcleos físicos, respetando los mínimos requeridos para cada 2 OSE adicionales.
Este proceso suele denominarse «apilamiento».
Con el lanzamiento de Windows Server 2022, Microsoft introdujo la opción de licenciar por máquina virtual, lo que permite a las organizaciones evitar volver a licenciar todo el host si no se dispone de OSE adicionales.
Aunque Microsoft lo promociona como una medida de ahorro, la realidad es más compleja.
Para obtener licencias por máquina virtual, las licencias de Windows Server deben tener Software Assurance (SA) activo o una suscripción de servidor.
Como Director de Ventas de Descuento-Licencias, analicé la rentabilidad de esta nueva opción de licencias en comparación con la compra de licencias de segunda mano.
Comparé los costes de Windows Server 2022 Standard desde varios canales de venta: seminuevo, perpetuo NCE/CSP, Licencia y Software Assurance/Software Assurance a través del programa Open Value, y suscripciones de servidor a través del canal CSP/NCE.
Todos los precios utilizados son los precios de venta al público recomendados en el Reino Unido en el momento de redactar este documento, y se esperan costes similares dentro de la UE tras tener en cuenta los tipos de cambio.
El requisito más común que nos encontramos es la licencia de 16 núcleos como mínimo, ya sea para un nuevo servidor que requiera un sistema operativo o para «apilar» un servidor existente para más OSE.
Según las normas actuales de licencias de Microsoft, se podría licenciar una máquina virtual de 8 núcleos utilizando una licencia con SA activo o mediante una suscripción de software sin licenciar el host.
Sin embargo, este escenario es poco probable; normalmente, existe la necesidad de aumentar los OSE disponibles.
Si no hay licencias de repuesto disponibles en tu patrimonio, será necesario disponer de licencias adicionales.
Añadir una sola máquina virtual utilizando licencias perpetuas, costaría aproximadamente 900 £ a través del programa de licencias Open Value Volume para las licencias necesarias de 8 núcleos con Software Assurance.
Esto representa un ahorro de algo más de 100€ en comparación con volver a licenciar el servidor con una nueva licencia sin SA, aunque obtendrías un OSE adicional (dos en total).
Sin embargo, si utilizas licencias de segunda mano, puedes renovar la licencia de todo el servidor por menos de 700 ¤, obteniendo dos OSE en lugar de sólo uno. Incluso licenciar un servidor de 20 núcleos y doble procesador con licencias Windows Server 2022 Standard de segunda mano costaría menos que la Licencia/SA de 8 núcleos.
El gráfico adjunto ilustra cómo aumentan los costes al añadir OSE de servidor adicionales mediante distintas opciones de licencia perpetua.
Ambas opciones de «sólo licencia» son significativamente más baratas que la compra con Software Assurance.
Las licencias de segunda mano son la solución más rentable para un servidor local, ya que cuestan menos del 40% de una licencia con SA con sólo 16 núcleos.
A medida que se añaden más OSE, esta diferencia aumenta.
En particular, el coste de cinco o más OSEs utilizando licencias nuevas sin SA se aproxima al coste de una licencia Datacenter de segunda mano que permite virtualización ilimitada o tres OSEs / 24 núcleos cuando se incluye Software Assurance. El plazo estándar de cobertura de la Garantía de Software es de tres años, tras los cuales sólo hay que recomprar el elemento SA, con un coste similar al de las licencias de segunda mano.
Sin embargo, los costes iniciales lo convierten en un importante compromiso financiero continuo.
La SA no puede añadirse a la licencia existente y debe adquirirse con una licencia nueva.
Cuando caduca, hay un plazo de 30 días para renovarla, tras el cual el proceso de compra debe empezar de nuevo si la decisión se revoca posteriormente.
Software Assurance proporciona ventajas adicionales, como derechos sobre nuevas versiones y la Ventaja Híbrida Azure.
Sin embargo, la rentabilidad de la inversión depende de la plena utilización de estas ventajas.
Aunque la perspectiva de pasar a la última versión tras el lanzamiento es atractiva, las migraciones suelen producirse sólo cuando son beneficiosas.
Además, es necesario sustituir las Licencias de Acceso de Cliente (CAL), a menos que también tengan SA o estén cubiertas por un plan 365 que incluya acceso al servidor.
El ahorro que supone adquirir licencias de segunda mano poco después del lanzamiento anula la ventaja de los derechos de las nuevas versiones.
Además, el mercado de segunda mano permite ahorrar más intercambiando licencias antiguas después de la migración.
Las licencias de suscripción son una solución viable a corto plazo, rentable para una sola máquina virtual que funcione durante menos de dos años o dos máquinas virtuales durante doce meses sin la ventaja híbrida de Azure.
Sin embargo, más allá de este periodo, el alquiler resulta más caro que la compra de licencias de servidor perpetuas de segunda mano, que carecen de valor residual una vez que ya no se necesitan.
Maximizar el retorno de la inversión es crucial, y nuestra ética en Discount-Licensing prioriza el interés del cliente sobre el del vendedor.
Pionera en el mercado secundario de software y celebrando su 20 aniversario en 2024, Discount-Licensing ofrece soluciones de software tanto de segunda mano como nuevas, a la vez que aporta valor mediante la compra de licencias por volumen redundantes.
Como especialista en Microsoft, me comprometo a encontrar las soluciones más rentables para nuestros clientes. Mick Shotton es un Experto acreditado en Soluciones de Licencias Microsoft con más de 15 años de experiencia en el mercado del software.